El Centro Regional de Diagnóstico de la Junta de Castilla y León, con sede en la localidad salmantina de Aldearrubia, participa en una investigación internacional que trata de desarrollar nuevos métodos de diagnóstico para la bacteria Erwinia amylovora, causante de la enfermedad vegetal conocida como 'fuego bacteriano'. Más de 15 países participan en la búsqueda de un método mundial de diagnóstico.
"Lo que más nos preocupa es el peral y el manzano, aunque el fuego bacteriano también afecta a otros árboles frutales de hueso, como el membrillo, y a plantas ornamentales, forestales y silvestres", explica José Luis Palomo Gómez, técnico del centro responsable del área de bacteriología que ha participado hoy en el curso de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Salamanca Implicaciones biológicas, ecológicas, medioambientales y prácticas de las interacciones entre los microorganismos y las plantas.
La enfermedad se conoce como fuego bacteriano porque deja un aspecto quemado y, en los casos más graves puede producir la muerte de la planta en muy poco tiempo. Además, la bacteria Erwinia amylovora tiene una gran facilidad de propagación y no existen tratamientos químicos efectivos, de manera que generalmente se aísla la zona en la que se ha localizado.
"Es una enfermedad que está causando bastantes daños en la comunidad, sobre todo en la provincia de León", señala el experto. Como se trata de un patógeno de cuarentena, en cuanto los técnicos encuentran un foco de la bacteria tienen que actuar y establecer una serie de medidas de erradicación para evitar que se pueda extender a otras zonas.
"Como consecuencia de distintas investigaciones internacionales se han desarrollado nuevos métodos de diagnóstico, pero ahora es necesario establecer en los laboratorios de diferentes partes del mundo si esos métodos de diagnóstico son efectivos para detectar la bacteria de una forma fiable y sobre todo si estos métodos son aplicables a todo tipo de condiciones en todo el mundo", apunta José Luis Palomo Gómez.
El clima, la forma de trabajar los cultivos o el funcionamiento de los propios laboratorios puede cambiar, según explica, así que es necesario comprobar las fórmulas de diagnóstico teniendo en cuenta todas las variables.
El centro de Aldearrubia
El Centro Regional de Diagnóstico, ubicado en Aldearrubia (Salamanca) es un centro oficial de la Junta que se dedica al diagnóstico de enfermedades de plantas en toda la comunidad. Su principal misión es realizar diagnósticos encomendados por la Unión Europea y el Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino para controlar determinados patógenos que se consideran peligrosos para los vegetales y así evitar que se puedan introducir y distribuir por Castilla y León, aunque también se atienden consultas de agricultores.
"Aunque la región no presenta cultivos muy variados, los patógenos que les pueden afectar sí lo son", afirma el experto. Por eso, el Centro de Diagnóstico trabaja con hongos, bacterias, virus, fitoplasmas, nematodos o insectos, en definitiva, todos los campos.
El trabajo comprende, por un lado, las prospecciones oficiales sobre patógenos peligrosos que se analizan en material vegetal y, por otro, un servicio técnico para atender peticiones y consultas de agricultores o cooperativas. Sólo en este servicio, el centro puede llegar a realizar entre 600 y 700 análisis anuales; mientras que las prospecciones oficiales pueden llegar hasta los 25.000 análisis anuales. Todo ello lo realizan menos de una decena de técnicos.
Además, el centro mantiene un área de investigación gracias a su relación con universidades y centros de investigación porque "consideramos que para estar en un nivel puntero hay que colaborar", afirma el experto.