La ideación suicida y la depresión, que hasta ahora se habían asociado con los tratamientos para el acné, podrían ser las consecuencias psicológicas de la presencia de esta enfermedad de la piel, no de los efectos de la medicación. Así lo indica una nueva investigación, realizada en Noruega, que supondrá la revisión del tratamiento y de los cuidados de los adolescentes con acné.
Hasta ahora los resultados de estudios controlados no confirmaban ninguna relación. Sin embargo, un nuevo estudio, publicado en la edición on line del Journal of Investigative Dermatology, asocia por primera vez determinados tratamientos para el acné con un mayor riesgo de ideas suicidas. Además, confirma una relación ya demostrada anteriormente, la de la depresión y el acné.
“Nuestros hallazgos indican que la depresión y la ideación suicida en personas con acné refleja la carga propia de este problema, en lugar de ser un efecto secundario de la isotretinoína, un medicamento utilizado para su tratamiento”, explica a SINC Halvorsen, autor principal del estudio y científico de la Universidad de Oslo (Noruega).
Para ello, el equipo de investigación analizó los resultados de una encuesta realizada a 3.775 adolescentes de Oslo con edades entre 18-19 años.Los resultados revelan que los sujetos con acné grave manifestaron pensamientos suicidas con más frecuencia que los adolescentes con menos acné.
“El acné se asocia también con problemas sociales en la comunidad, lo que significa que es una cuestión que debe tomarse en serio por los especialistas de atención médica”, afirma Halvorsen.
Los problemas de salud mental y deterioro social también fueron más comunes en adultos jóvenes con acné importante. En comparación con sus iguales sin acné o con acné leve, el doble de las chicas y el triple de los chicos con acné grave indicaron tener ideaciones suicidas.
Los autores confían en que estos hallazgos repercutan en el desarrollo de nuevos tratamientos y los cuidados de los adolescentes con acné.
Sufrimiento juvenil
El acné es una enfermedad de la piel que afecta de forma frecuente a los adolescentes durante una etapa importante de su desarrollo social. Las relaciones sociales cambian y se desarrollan a medida que los adultos jóvenes se van haciendo más independientes, y la apariencia física es un factor esencial para mantener la imagen propia y la confianza en uno mismo.
Paz Vega, dermatóloga y miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología, apunta el carácter multifactorial del acné y de sus posibles consecuencias, y subraya que el tratamiento actual es capaz de curar el acné inicial y que no vaya a más. "No todo el mundo con acné severo tiene riesgo de suicidio. Lo que ocurre es que si esto se une a una personalidad obsesiva o con baja autoestima, entonces las consecuencias psicológicas negativas son mayores".
La ideación suicida es un síntoma y un indicador de sufrimiento emocional, aunque no necesariamente acabe en intentos de suicidio.
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Referenciabibliográfica:
Halvorsen et al.: Journal of Investigative Dermatology, 16 de septiembre de 2010. DOI:10.1038/jid.2010.264.
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