Tras varios aplazamientos, hoy por fin ha iniciado su último vuelo el transbordador espacial Endeavour. La nave ha despegado poco antes de las 15h (hora peninsular) desde Cabo Cañaveral (EE UU) rumbo a la Estación Espacial Internacional, a donde transporta el Espectrómetro Magnético Alpha, un avanzado detector de rayos cósmicos desarrollado con tecnología española.
El transbordador Endeavour ha partido hoy a las 14h56 (hora peninsular) desde el Centro Espacial Kennedy en Cabo Cañaveral (Florida, EE UU), dando comienzo a su misión de 16 días a la Estación Espacial Internacional (ISS) . Se trata de un acontecimiento aeroespacial histórico, ya que es el último vuelo de la nave.
A bordo del Endeavour viajan los seis astronautas que forman parte de esta Misión STS-134: el comandante Mark Kelly, el piloto Gregory Johnson y los tres especialistas de la misión Michael Fincke, Greg Chamitoff y Andrew Feustel, además del astronauta de la Agencia Espacial Europea (ESA) Roberto Vittori.
Durante la misión, los astronautas entregarán el Espectrómetro Magnético Alpha-2 (AMS-02), un detector de partículas diseñado para buscar diversos tipos de materia (incluida la materia oscura) y antimateria en el Universo. Su principal objetivo es determinar si quedan en el cosmos restos de antimateria surgida en los primeros momentos tras el Big Bang, y desarrollar el mayor proyecto con rayos cósmicos de la historia.
La participación española en esta iniciativa ha sido coordinada por el Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (CIEMAT) y ha contado con la participación de Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), dos instituciones dependientes del Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINN). Representantes de estas instituciones acudieron el pasado 29 de abril al despegue que hubo que retrasar debido a problemas técnicos.
Cuando llegue a la ISS, el Endeavour también hará entrega de la Express Logistics Carrier 3 (ELC3), una plataforma que permite instalar experimentos y repuestos en el exterior de la estación. El ELC irá cargado con dos antenas de comunicaciones, un tanque de oxígeno, un depósito de amoníaco para los sistemas de refrigeración y un nuevo componente para el brazo robótico Dextre.
La tripulación del Endeavour realizará cuatro paseos espaciales para instalar los nuevos componentes en el exterior de la Estación Espacial Internacional. Serán los cuatro últimos de la historia del legendario trasbordador.