Un trabajo de la Subdirección de Promoción de la Salud y Prevención de la Consejería de Sanidad madrileña ha cuantificado por primera vez que el 8,8% de las madrileñas sufre malos tratos sin saberlo, más del doble que las mujeres que reconocen la violencia de la pareja (3,4%).
Numerosos estudios han analizado las consecuencias sobre la salud de las mujeres que sufren violencia de género, pero hasta ahora ninguno había analizado qué ocurre cuando las víctimas no perciben el maltrato. ¿Cómo determinar una situación de violencia de género no declarada por la afectada?
Un estudio de la Subdirección de Promoción de la Salud y Prevención de la Consejería de Sanidad madrileña, que publica la revista Gaceta Sanitaria, ha realizado una entrevista telefónica a 2.835 mujeres de entre 18 y 70 años residentes en la Comunidad de Madrid, con 26 preguntas basadas en cuestionarios internacionales que incluyen cuestiones específicas sobre la violencia física, sexual y psicológica dentro de la pareja.
Además, al finalizar la batería de preguntas, las participantes debían responder a una última cuestión: “¿Te sientes maltratada por tu pareja o ex pareja?”.
"Aunque 247 participantes declararon no sentirse maltratadas por la pareja o ex pareja en el último año, en realidad sí cumplían con los criterios de violencia de género. En la mayoría de los casos ( 90,7%) habían sufrido algún tipo de violencia psicológica", apunta la investigación.
La violencia de pareja hacia la mujer a menudo se inicia con episodios que las víctimas asumen como normas habituales o con un control obsesivo que suele confundirse con el amor.
"El 5,4% y el 3,9% restantes presentaban casos de violencia física y sexual, respectivamente. Entre las víctimas de malos tratos, tanto percibidos como no percibidos, existe un mayor porcentaje de extranjeras y con un nivel socioeconómico bajo que entre las mujeres que no sufren violencia de género", aseguran. También aumentan los casos de relaciones finalizadas y la presencia de experiencias de violencia antes de los 15 años.
Depresión y trastornos de ansiedad
La principal consecuencia sobre la salud de las mujeres que no perciben la violencia en su pareja es la depresión. El 28,3% ha sido diagnosticada con un trastorno depresivo y el 17,8% con trastornos de ansiedad. Esto se traduce en un mayor consumo de ansiolíticos (23,5%) y antidepresivos (14,6%) y en un aumento de la demanda de terapia de apoyo o psicológica (6,9%).
Según el trabajo: "Curiosamente, el riesgo de consumo de medicamentos para perder peso en las mujeres que padecen violencia de la pareja no percibida es cuatro veces superior al de las mujeres que no sufren malos tratos".
Sin embargo, el deterioro en la salud de estas mujeres va más allá de lo puramente mental. Una peor autopercepción de la salud, limitaciones en su actividad diaria, presencia de asma, úlceras estomacales, mayor número de accidentes en los últimos doce meses y el tabaquismo son más frecuentes entre las mujeres que sufren malos tratos sin percibirlo. Situaciones que conllevan también un mayor consumo de medicamentos, antibióticos y otros fármacos para el sistema gastrointestinal.
Las autoras, por tanto, reclaman a los profesionales de la salud "un mayor esfuerzo para detectar los malos tratos no percibidos por la pareja, para ayudar a las mujeres a reconocer su situación y tomar las medidas necesarias para preservar su salud".
Referencia bibliográfica:
Sonego, Michela et al. Unperceived intimate partner violence and women's health. Gac Sanit 2013;27:440-6.