Bioquímicos de la Universidad de Córdoba han logrado identificar y regular el compuesto eugenol, presente en las fresas, que repele a los insectos y atrae a los animales polinizadores que expanden sus semillas. Este hallazgo puede dar lugar a nuevas variedades más aromáticas y de interés para la industria cosmética, alimentaria y de insecticidas.
La fresa no es una planta discreta. Desarrolla una flor con pétalos blancos y filamentos amarillos y un fruto rojo brillante que llaman la atención de animales, tanto de los frugívoros que permiten expandir sus semillas, como de los insectos que la pueden parasitar. Para atraer a unos y repeler a otros, ha desarrollado un mecanismo molecular con un compuesto llamado eugenol.
Investigadores de la Universidad de Córdoba y del Campus de Excelencia Internacional Agroalimentario ceiA3 han descrito los procesos genéticos que abren las puertas a aumentar la producción de esta substancia, interesante para la industria cosmética y la de los alimentos delicatessen. La fresa es un cultivo de especial interés para Andalucía, porque la provincia de Huelva concentra el 90% de la producción nacional.
Los investigadores se han centrado en los procesos de maduración de la fresa (Fragaria × ananassa) y, concretamente, las bases moleculares que influyen en ellos. “El fin último es conseguir frutos más saludables, que tengan un ciclo de consumo más prolongado o con mayor calidad”, explica el responsable del grupo, Juan Muñoz.
Para ello, seleccionan genes potenciales de interés y aplican técnicas de datos masivos (big data, en inglés). A partir de aplicaciones bioinformáticas, los investigadores hacen una criba de los genes implicados en procesos de interés agronómico, como la fresa. De esta manera, también pueden modificar experimentalmente las plantas y observar si al silenciar o potenciar un gen mejoran las características del alimento.
La investigación
El equipo ha publicado los resultados de una investigación en torno al eugenol, compuesto relacionado con el aroma que puede influir en la futura producción de variedades más aromáticas o en la generación de cultivos de segunda generación que provean a diferentes industrias como la cosmética de compuestos de interés comercial.
El eugenol es un compuesto volátil que la planta utiliza tanto en funciones de atracción a polinizadores como de defensa antibactericida. Los investigadores han identificado cómo unas proteínas llamadas factores de transcripción regulan la expresión de los genes que dan la señal para producir este compuesto. Las células de las plantas disponen de diferentes vías metabólicas que se abren o cierran según sus necesidades a partir de la expresión de sus genes. Los investigadores han creado un trasvase entre estos cauces y, a partir de modificaciones genéticas, han sido capaces de abrir las compuertas de este canal para disponer de más cantidad de eugenol.
Disponer a voluntad de mayor cantidad del compuesto permitirá generar fresas más aromáticas, que pueden tener un nicho de interés en personas que valoren esta propiedad del alimento, pero también para industrias como la cosmética o la de insecticidas. También tiene ventajas para los productores freseros, ya que con una planta con mayor capacidad de generar esta substancia antibactericida, tendrán que realizar menos tratamientos fitosanitarios y generarán menos residuos derivados de los pesticidas en el entorno.
Referencia bibliográfica
L. Medina, F.J. Molina, M. Boersma, R.C. Schuurink, I. López Vidriero, R. Solano, J. M. Franco Zorrilla, J.L. Caballero, R. Blanco, J. Muñoz. ‘An R2R3-MYB Transcription Factor Regulates Eugenol Production in Ripe Strawberry Fruit Receptacles. Plant Physiology. 2015 Jun. 168 (2): 598-614. DOI: 10.1104/pp.114.252908