La redistribución de los átomos y electrones cuando se dobla un material se puede aprovechar para generar una corriente eléctrica. Hasta ahora se pensaba que esta propiedad, denominada flexoelectricidad, era exclusiva de los materiales aislantes, pero investigadores del instituto ICN2 han demostrado que los materiales semiconductores también pueden ser flexoeléctricos e incluso generar mucha más electricidad que los aislantes. El descubrimiento ya se ha patentado por sus posibles aplicaciones.
Desde la invención del transistor a mediados del siglo pasado, la electrónica no ha parado de evolucionar, siguiendo el ritmo vertiginoso de la computación. Un equipo internacional de científicos, en el que participa la Universidad Complutense de Madrid, ha avanzado en el análisis de las propiedades físicas de nuevos materiales basados en óxidos, lo que podría suponer un antes y un después para la nanoelectrónica.
En radioastronomía se utilizan amplificadores que mejoran la recepción de las débiles señales de la radiación electromagnética de los cuerpos celestes. Hasta ahora se pensaba que cuanta más baja era la temperatura de estos dispositivos, más limpia era dicha señal, pero un estudio de científicos suecos, estadounidenses y españoles ha revelado que esa mejora tiene un límite a temperaturas extremadamente bajas.