El galardón de este año conmemora a dos científicos por el hallazgo de un principio fundamental que rige la regulación de la actividad de los genes. Ambros trabaja en la Facultad de Medicina de la Universidad de Massachusetts y Ruvkun en la de Harvard, ambas en EE UU.
Un nuevo análisis con Drosophila melanogaster ha revelado un grupo de genes involucrados en la regeneración y conservación de órganos y tejidos en distintas especies. Este trabajo demuestra la creciente importancia de la bioinformática para entender procesos biológicos básicos.
Un equipo de investigación del Centro de Regulación Genómica desvela un nuevo mecanismo epigenético involucrado en la diferenciación de las células madre embrionarias. El estudio forma parte del proyecto 4DCellFate, financiado por la UE, que tiene como objetivo el estudio de las proteínas que controlan la función de las células madre.
La actina es una proteína que forma el citoesqueleto de las células, y que participa en multitud de procesos celulares. El grupo de Antonio Leyva del Centro Nacional de Biotecnología (CNB) demuestra en la revista Developmental Cell que esta proteína es suficiente para alterar la expresión de los genes.
Un equipo investigador ha descrito unos patrones de regulación entre genes relacionados con las neuronas que captan los estímulos visuales en el ojo de la Drosophila melanogaster, la conocida mosca de la fruta, que es un modelo biológico en estudios de genética y desarrollo. Los resultados aparecen publicados esta semana en la edición on-line de la revista Nature.