Una nueva técnica de datación ha revelado que un canguro de dos metros, dibujado con pigmentos de antiguos nidos de avispas hace unos 17.100 años en Australia, es la pintura más primitiva del país. Los autores sugieren que podría haber un vínculo cultural con pinturas del sudeste asiático de unos 40.000 años de antigüedad.
Detalle de las pinturas.