Investigadores de la UNED y de la Universidad Estatal de Arizona (EE UU) han propuesto una nueva teoría para explicar las bases de las conductas obsesivas o los tics. Hasta ahora se pensaba que los mecanismos que originan estas acciones poco tenían que ver con los que provocan comportamientos como comer o dormir, que generan una recompensa. Sin embargo, este estudio, en ratas, concluye que ambos tipos de comportamientos sí están relacionados.
Los individuos con trastorno obsesivo-compulsivo (TOC) se caracterizan por pensamientos persistentes y conductas repetitivas. Un nuevo estudio revela que estas personas desarrollan una preocupación significativamente mayor que la población general ante problemas de tipo moral.