Después del hallazgo de ‘Oumuamua hace dos años, un nuevo objeto procedente del exterior del sistema solar, Borisov, ha sido detectado por un astrónomo aficionado. Al contrario que con su predecesor, esta vez no se tiene ninguna duda de que se trata de un cometa. Investigadores de la Universidad Jagiellonian de Cracovia publican hoy los detalles de este cuerpo celeste que solo estará con nosotros hasta septiembre del 2020.
Las primeras observaciones de un asteroide llegado a nuestro sistema solar procedente del espacio interestelar han sorprendido a los astrónomos. El objeto, bautizado con el nombre hawaiano de ‘Oumuamua, no se parece a nada visto antes: es metálico o rocoso, con un color rojo oscuro y, sobre todo, muy alargado. Su longitud es de al menos 400 metros y, después de girar cerca del Sol, se aleja a la vertiginosa velocidad de 95.000 km/h.