Cada vez hay más alumnos extranjeros en las aulas, muchos de ellos con un idioma distinto al de su entorno sociolingüístico. Un estudio de la Universidad de Girona ha evaluado el conocimiento de catalán y castellano de estos niños y niñas, y confirma que tardan, por lo menos, seis años en tener el mismo nivel en lengua que los alumnos nacionales. Los investigadores proponen un nuevo sistema, probado con éxito en otros países, para impedir que el idioma sea una barrera para el desarrollo académico.