Correr más en los partidos no asegura la victoria. Esa es la conclusión a la que han llegado investigadores de Madrid y Vigo que, tras analizar 149 partidos jugados por el Real Madrid en diferentes temporadas, han concluido que las victorias no se correspondían siempre con aquellas ocasiones en las que sus jugadores habían sido superiores físicamente a los rivales.
La presencia de la mujer en la prensa deportiva es notablemente inferior a la del hombre. En concreto, la mujer tan solo aparece en un 5% de los casos, mientras que el hombre lo hace en más de un 92 por ciento, según una investigación de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M).
Más de 100 futbolistas de ambos sexos han sido monitorizados durante partidos de la UEFA Champions League para realizar una investigación en la que se ha comparado el rendimiento deportivo de jugadores y jugadoras de fútbol de élite. El estudio indica que no hubo diferencias en el número de contactos, tiempo de posesión del balón y total de duelos ganados.
Investigadores de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) utilizan un GPS que facilita diez posiciones por segundo para evaluar los movimientos de los jugadores de fútbol. Los resultados revelan que los centrocampistas recorren más distancia y los mediapuntas dominan en cuanto a número de aceleraciones.
Investigadores estadounidenses han estudiado la actividad cerebral de futbolistas amateurs y han concluido que realizar entre 1.000 y 1.500 remates de cabeza al año puede provocar consecuencias similares a las de un traumatismo cerebral.
Diversos estudios sobre futbolistas de categorías pertenecientes a edades inferiores ya habían demostrado que el vigor, la rapidez y la capacidad de auto-orientarse y de adelantarse son los rasgos que caracterizan a aquellos que juegan en los mejores equipos. A lo que hay que añadir el porcentaje graso, la potencia aeróbica, la tolerancia al agotamiento y la capacidad de driblar. El biólogo Jaime Zubero ha extrapolado los citados estudios a Bizkaia, ratificando dichos resultados, en una tesis presentada en la UPV/EHU.
Según un estudio de la Universidad de Oviedo, el cambio de reglamento en las ligas europeas de la prima por victoria, que pasó de dos a tres puntos, supuso que el juego sucio en los partidos de fútbol aumentara. Los investigadores utilizaron como indicador de “sabotaje” en los partidos el número de tarjetas rojas que se sacaron en cada partido durante las temporadas 94/95 y 95/96, en las que se produce el cambio de puntuación.