Como los seres humanos, las plantas necesitan hierro para crecer fuertes y sanas. Pero ellas tienen que buscarlo en su entorno más inmediato: el suelo en el que crecen, donde es abundante, pero poco soluble. Los vegetales han aprendido a extraerlo por medio de diferentes estrategias. Una de ellas es a través de una hormona que se activa en situaciones de estrés, llamada etileno, que se podría equiparar en cierto modo a la adrenalina humana. Investigadores de la Universidad de Córdoba describen los mecanismos en los que está implicado el etileno.
Un equipo internacional de científicos, liderado por la Universidad de Málaga, ha estudiado la regulación a nivel genómico de la traducción de proteínas a plantas, un proceso biológico fundamental hasta ahora solo realizado en levadura y células de cultivo. El estudio, que ha analizado por primera vez los cambios cuantitativos en la traducción de proteínas a gran escala de una planta modelo a tiempo real, ha identificado a EIN2, un componente clave en rutas de señal de plantas.
Investigadores españoles y franceses crean un nuevo método para usar el metano como materia prima.