El seguimiento de la ecolocalización, que es el sonido que emiten animales como los cetáceos para orientarse, se puede utilizar para rastrear los movimientos de delfines de agua dulce que habitan en zonas inaccesibles de la cuenca del Amazonas. Esto es lo que ha hecho un equipo del Laboratorio de Aplicaciones Bioacústicas de la Universidad Politécnica de Cataluña. Los resultados se han publicado en la revista Scientific Reports.
Un equipo científico internacional con participación española ha detectado el ADN de una bacteria del género Mycoplasma en la sangre de dos especies de delfines que habitan los ríos y lagos de la selva amazónica. Hasta ahora, estas bacterias solo se conocían en especies terrestres, en las que puede causar anemia, fiebre y hasta la muerte.