Según el último estudio ISTAPS, la intervención del personal sanitario de atención primaria es relevante para tratar de dejar de fumar. El 75% de los fumadores que pretenden seguir con su hábito cambian de opinión gracias a doctores y enfermeras aunque solo el 8% consigue dejar el tabaco de forma estable.
Una variación en un gen explicaría por qué algunas personas tienen más dificultades que otras para dejar de fumar.
La drogodependencia es un tipo de adicción recurrente pero tratable. Sin embargo, no todas las personas drogodependientes evolucionan igual al dejar el consumo de drogas. Un nuevo estudio muestra que, en el caso de la cocaína, una puntuación alta en la llamada ‘Escala de craving’ (ansia o deseo de consumo), una personalidad antisocial y haber consumido heroína son los principales factores para recaer en su consumo.