Un estudio desarrollado por investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid demuestra que la sustitución de los barbechos de otoño-invierno por cultivos que cubran el suelo favorece la eficiencia del uso del nitrógeno en el cultivo de maíz.
El centro tecnológico NEIKER-Tecnalia investiga la influencia que tiene la utilización de una cubierta vegetal temporal y diferentes dosis de riego sobre la producción, el vigor de las vides y la calidad de la uva y el vino. Los primeros resultados muestran una reducción de la disponibilidad hídrica del viñedo, que se refleja en una disminución de la producción y vigor, así como en una mejora de los parámetros de calidad del mosto y del vino. El estudio ayudará a la comunidad viticultora a conocer mejor los viñedos y modificar sus prácticas de cultivo.