Las células que tiene a su disposición más nutrientes llegan a ser más grandes porque retrasan el momento de la división y tienen más tiempo para crecer. Investigadores españoles han descubierto el mecanismo molecular que hace posible esta coordinación entre el crecimiento y la división celular. Estos procesos están directamente relacionados con el envejecimiento y con enfermedades como el cáncer.
En términos de grafeno, la aplicación hace al material. Con ese planteamiento, investigadores del ITMA Materials Technology han preparado espumas de grafeno orientadas a guiar el crecimiento de células que formen tejidos creados en laboratorio.