Las personas que se sienten seguras sobre su relación de pareja tienen una vida erótica más satisfactoria y son más capaces de ofrecer cuidados sensibles. Por el contrario, las personas inseguras, tendentes a la ansiedad o la evitación y al cuidado compulsivo o controlador, viven el deseo sexual de manera más conflictiva y están más insatisfechas en la relación de pareja, según un estudio de la Universidad del País Vasco.