Un equipo de sismólogos ha analizado las señales sísmicas generadas por los toques de campanas utilizados para marcar las horas en iglesias de Grecia, Francia, Italia y España. Los resultados muestran diferencias entre los campanarios, como por ejemplo, que en Grecia no suenan las campanas después de comer o que en Italia se registran unas 768 campanadas al día.