Diversos estudios sobre futbolistas de categorías pertenecientes a edades inferiores ya habían demostrado que el vigor, la rapidez y la capacidad de auto-orientarse y de adelantarse son los rasgos que caracterizan a aquellos que juegan en los mejores equipos. A lo que hay que añadir el porcentaje graso, la potencia aeróbica, la tolerancia al agotamiento y la capacidad de driblar. El biólogo Jaime Zubero ha extrapolado los citados estudios a Bizkaia, ratificando dichos resultados, en una tesis presentada en la UPV/EHU.
Leyre Gravina ha querido demostrar a través de su tesis doctoral que, además del talento y la preparación, la alimentación es muy importante para ser un buen deportista. Para ello ha entrado en el vestuario de los dos principales equipos femeninos del Athletic y ha observado qué y cuánto comen. Ha concluido que con sólo cambiar algunas malas costumbres se puede conseguir que el cuerpo sufra menos en los partidos, y, en consecuencia, aumentar la posibilidad de ser mejor deportista.