Este suplemento ayudará a disminuir en un 20 % o 35 % las emisiones de este gas de efecto invernadero que emiten los rumiantes al eructar. Además, es seguro tanto para los animales como para los consumidores y no afecta a la calidad de los productos lácteos.
El biopolímero natural denominado quitosano se presenta como una eficaz alternativa a los antibióticos promotores de crecimiento en la dieta de los rumiantes, según una investigación llevada a cabo por investigadores del centro tecnológico vasco Neiker-Tecnalia. La presencia de estos antibióticos como aditivos en la alimentación de rumiantes está prohibida en la Unión Europea desde 2006, debido a que su uso se relaciona con el desarrollo de resistencias microbianas a los antibióticos.