Un nuevo estudio revela que la bacteria Staphylococcus aureus resistente a la meticilina apareció hace unos 200 años en la piel de los erizos, donde también vive un hongo parásito que produce antibióticos contra ella de forma natural.
Un equipo científico internacional ha descubierto, por primera vez, el mecanismo que permite que los antibióticos β-lactámicos produzcan la muerte de Staphylococcus aureus resistente a la meticilina. Estos fármacos provocan la aparición de agujeros en la pared celular, que se agrandan durante la etapa de crecimiento hasta producir el colapso de esta y, como consecuencia, la muerte de la bacteria.
Investigadores de Cataluña han localizado una pieza decisiva de la maquinaria que permite a Staphylococcus aureus transferirse genes de resistencia a antibióticos. Las bacterias S. aureus representan una amenaza letal en hospitales de todo el mundo. Interrumpir la propagación de cepas de bacterias resistentes es una de las estrategias para combatir las infecciones en los hospitales.
Un equipo de investigadores de Castilla y León y la Universidad de Galati, en Rumanía, ha puesto de manifiesto la importancia que tiene la cadena alimentaria como posible correa de transmisión de una bacteria que causa frecuentes infecciones intrahospitalarias y que está originando graves problemas de salud pública en todo el mundo.
Una nueva investigación señala cómo una molécula liberada por el patógeno Staphylococcus aureus puede inducir dermatitis atópica en ratones. El hallazgo, publicado en Nature, podría mejorar el tratamiento de esta enfermedad alérgica de la piel.