Un equipo internacional de científicos, con participación española, ha recuperado por primera vez material proteínico del esmalte dental de Homo antecessor con una antigüedad de 800.000 años. El análisis sugiere que esta especie, una de las primeras especies de homínidos, estuvo estrechamente relacionada con Homo sapiens, Homo neanderthalensis y denisovanos.
Tras analizar dos omóplatos de Homo antecessor, un equipo de científicos revela que esta especie humana ya había perdido por completo su capacidad para trepar con facilidad. El estudio, que debate la hipótesis de que estos homínidos pudieran arrojar piedras u objetos con relativa precisión, confirma también que el esqueleto postcraneal era muy similar al de los humanos actuales.
Un estudio demuestra que la antropofagia era una estrategia de alto beneficio con bajo coste hace un millón de años en Atapuerca. Los humanos fueron consumidos en una proporción mucho mayor de lo esperable.
Los dientes de homínidos como el Homo antecessor que habitaron la Sima de los Huesos en Atapuerca eran muy parecidos a los de los neandertales, según el estudio sobre la histología dental realizado en el yacimiento. Hasta ahora, el patrón que presentan los dientes de las Sima de los Huesos era considerado un rasgo distintivo de los Homo neanderthalensis. Estos resultados refuerzan la estrecha relación entre estas dos especies humanas.
Un equipo del Centro Nacional de Investigación sobre Evolución Humana, de Burgos, ha estudiado la dentición temporal de la población infantil de Homo antecessor. Según el trabajo, esta especie del Pleistoceno inferior, hallada en el nivel TD6 del yacimiento de Gran Dolina de Atapuerca, tenía rasgos muy primitivos en los dientes mezclados con caracteres derivados.
El Homo antecessor, una especie que habitó la península ibérica hace unos 800.000 años, habría tenido un patrón alimentario mecánicamente más exigente que el de otras especies de homininos de Europa y el continente africano, según un estudio publicado por la revista Scientific Reports y coliderado por la Universidad de Barcelona, el Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES) y la Universidad de Alicante.
El investigador del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana, Isidoro Campaña Lozano, ha publicado un trabajo en la revista Scientific Report en el que se describen todos los procesos de formación del nivel TD6 del yacimiento de Gran Dolina en Atapuerca, donde se descubrió Homo antecessor.
Un científico del Centro Nacional de Investigación de Evolución Humana, en Burgos, lidera tres estudios paleoneurológicos en los que se analizan los cráneos de Buia y Maba, encontrados en Eritrea y China, respectivamente, así como el estudio anatómico del parietal de Homo antecessor, hallado en España.
El análisis detallado de 148 molares inferiores de diferentes especies de homínidos de los yacimientos de la Sierra de Atapuerca en Burgos no solo reafirma los caracteres modernos y primitivos de Homo antecessor, que vivió hace un millón de años, sino que demuestra que las especies migraron y se cruzaron más de lo que se pensaba para poblar el continente europeo. Así lo revelan científicos del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana.
En mayo de 1997, un equipo de investigadores descubrió en la sierra de Atapuerca (Burgos) los primeros restos de una nueva especie: Homo antecessor. Este mes se cumplen 18 años del hallazgo que, aún hoy, está sujeto a controversia. Los científicos José Mª Bermúdez de Castro y María Martinón-Torres, entre otros, recogen en un estudio las investigaciones realizadas durante los últimos años sobre esta especie, a la espera de hallar más fósiles en el yacimiento de la Gran Dolina.