Conocidas como hormigas del azúcar en Australia, estos insectos, protagonistas del #Cienciaalobestia, prefieren en realidad la orina seca de los canguros y otros animales que encuentran en la arena. Un estudio muestra cómo durante la noche extraen moléculas de nitrógeno de la urea, evitando la formación del perjudicial gas de efecto invernadero, el óxido nitroso.
Investigadores de la Universidad de la Rioja y otros centros internacionales proponen un nuevo fluido de trabajo para los sistemas geotérmicos mejorados: el óxido nitroso. De esta forma se puede aumentar la eficacia en la obtención de electricidad a gran escala procedente de esta fuente de energía renovable.
La incorporación de subproductos agroindustriales, como pulpa de naranja y algarroba, en piensos para cerdos puede reducir hasta un 65% las emisiones de óxido nitroso (N2O, un gas de efecto invernadero) de los purines que luego se utilizan como fertilizantes. Así lo refleja una investigación de la Universidad Politécnica de Madrid, en la que ha colaborado la Universidad Politécnica de Valencia.
Investigadores de la Universidad Politécnica de Madrid y de la Universidad de Wageningen (Países Bajos) han demostrado que elegir unas plantas u otras en los cultivos puede servir para regular las emisiones de óxido nitroso a la atmósfera. En un experimento observaron reducciones de hasta un 44% cuando se sembraron dos especies herbáceas en lugar de una sola.