Un nuevo estudio analiza cómo el envejecimiento afecta a la segregación cromosómica, el procesamiento del ARN y el metabolismo mitocondrial. Los resultados muestran que la edad puede influir en la capacidad de un ovocito para procesar productos genéticos críticos para los últimos pasos de su desarrollo.
La fecundación in vitro a partir de ovocitos de otras mujeres genera en España más de 600 millones de euros al año, sin embargo, a ellas se les pide que vean el proceso como una donación. Un proyecto internacional, con participación de España, se centra en ellas para entender sus experiencias y el papel que representan en un mercado en el que, según los investigadores, son la pieza más vulnerable.
Congelar los óvulos para el futuro en aquellas mujeres que quieren posponer su embarazo es más efectivo cuando se hace entre los 20 y los 35 años. Así lo advierten los expertos en medicina reproductiva durante las primeras sesiones del 7º Congreso Internacional del IVI, que tiene lugar estos días en Bilbao. Los ovocitos van perdiendo calidad con los años.
Según un estudio del Instituto Valenciano de Infertilidad, cuando una mujer intenta ser madre con óvulos vitrificados de una donante, las probabilidades de éxito se acumulan cuantos más consuma, y se estancan a partir de los 40 óvulos. El trabajo se ha presentado en la reunión anual de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología, celebrada en Múnich. Otro estudio español revela que la mayor parte de las parejas de reproducción asistida prefiere mellizos.
Investigadores de la Universidad de Umea (Suecia) han identificado la vía de señalización molecular que dirige la activación de los folículos inmaduros durmientes que existen en los ovarios de las mujeres. El hallazgo puede hacer que la fertilización in vitro sea mayor y aplicable, no sólo en humanos, si no también en especies animales amenazadas.