El presidente estadounidense, Barack Obama, ha apelado a la acción mundial conjunta para combatir el cambio climático, señalando que la incapacidad de solucionar el problema podría llevar a una catástrofe "irreversible" en los próximos años."Nos arriesgaríamos a condenar a las generaciones futuras a una catástrofe irreversible".
En un discurso que fue acogido con aplausos pero no con entusiasmo por los líderes presentes, Obama instó a la colaboración de cara a la Cumbre de Copenhague en diciembre y subrayó el cambio de posición de su país desde su llegada a la Casa Blanca. El mandatario advirtió de que el tiempo para afrontar el problema se está acabando.