En su órbita elíptica, la Luna alcanza su perigeo o punto más cercano a la Tierra cada 27,55 días, pero tres o cuatro veces al año se acerca más de lo habitual y llega a coincidir con una luna llena. Se produce entonces una superluna, que desde nuestro planeta se observa un 14% más grande y un 30% más brillante de lo habitual.
Este 14 de noviembre ocurre uno de estos fenómenos. Además, esta superluna es especial por ser la más cercana desde 1948 y la más próxima en lo que va de siglo. No habrá otra igual hasta el año 2034, aunque hasta 2052 no se podrá disfrutar de la más grande del siglo XXI.
En realidad las superlunas son muy difíciles de diferenciar de una luna llena 'normal' y el término tiene un origen poco científico, ya que fue acuñado por el astrólogo norteamericano Richard Nolle en 1979.