Un grupo de científicos australianos estudiará el impacto de la acidificación de las aguas oceánicas pronosticada durante este siglo en el lecho marino de la Antártida, informaron ayer fuentes oficiales. Para ello sumergirán cuatro cámaras acrílicas a una profundidad de entre 10 a 20 metros bajo del hielo marino en la bahía O'Brien, cerca de la estación antártica Casey, entre los meses de noviembre próximo y marzo de 2015, según un comunicado de la División Australiana Antártica.
En las zonas donde se sumergirán esas cámaras se aumentará el nivel de la acidez del agua para replicar las condiciones que se pronostican durante el presente siglo. De seguir la tendencia de las emisiones contaminantes actuales, se calcula que el nivel de la acidez de los océanos aumentará en dos veces y medio para el año 2100.