La NASA ha impactado con éxito hoy las dos naves de la misión LCROSS contra la superficie de la Luna, según ha confirmado la agencia espacial estadounidense. El objetivo de esta misión es detectar la presencia de agua helada en el satélite mediante el análisis del material levantado tras el impacto. El descubrimiento de suministros de agua en la Luna facilitaría su exploración y el establecimiento de bases humanas estables.
La animación muestra el trabajo que va a realizar la misión.