Según un Real Decreto aprobado hoy por el Consejo de Ministros, las cajetillas de tabaco incorporarán pictogramas que alertan y advierten sobre los peligros del tabaquismo. Se trata de imágenes reales de las consecuencias de fumar como el cáncer de pulmón, enfermedades cardiovasculares y todo tipo de afecciones. La nueva norma modifica el Real Decreto 1079/2002, de 18 de octubre, por el que se regulan los contenidos máximos de nicotina, alquitrán y monóxido de carbono de los cigarrillos. Para los no fumadores cualquier medida es buena, pero no creen en su impacto. Las tabaqueras tienen hasta dos años para vestir sus cajetillas con las imágenes disuasorias.