El 8 de febrero de 1868 el monje agustino Gregorio Mendel (1822-1884) lee su primer artículo sobre hibridación de las plantas a la Sociedad de Investigación Natural de Brno (actual República Checa). Entre los años 1856 y 1863 Mendel cultivó cuidadosamente en su monasterio unas 28.000 plantas de guisantes (Pisum sativum) y anotó sus experimentos de cruce.
El monje observaba la forma, altura, ubicación y color de las flores, además de la forma y el color de la semilla de cada una de las plantas. Aquel día y en sesiones posteriores expuso los conceptos de factor dominante y recesivo, así como las leyes de uniformidad, segregación equitativa y transmisión independiente de la herencia.
A pesar de que se considera que este texto fundó la genética moderna, solo fue citado tres veces en los siguientes 35 años.