Aventurero, comunicador, médico, amante de la cetrería, biólogo autodidacta y hasta guía de safaris. Extenso curriculum el de Félix Rodriguez de la Fuente (14 de marzo de 1928 - 14 de marzo de 1980), donde destaca su faceta como divulgador a través de documentales para todos los medios.
De la Fuente marcó a toda una generación cuando, a mediados de los 70, estrenó la serie El hombre y la tierra. Considerada ahora historia de la televisión, la serie fue vista en todo el mundo y contribuyó a la creación de una incipiente conciencia ecologista en España, donde apenas existían movimientos de reivindicación en defensa de la naturaleza.
El Amigo Felix, incansable defensor del medio ambiente, fue de los principales promotores de la promulgación de los Parques Naturales y de las leyes de preservación de especies como el halcón peregrino y el lobo, animal especialmente ligado a su figura.
El día que cumplía 52 años, pierde la vida al estrellarse la avioneta en la que viajaba mientras sobrevolaba el círculo polar ártico, en Alaska. Justo antes de subir al aparato había comentado: "¡Que lugar tan hermoso para morir!".