Cuando en 2003 empezaron las excavaciones paleontológicas cerca del pueblo turolense de Riodeva, sus habitantes no salían del asombro: compartían territorio con los extintos dinosaurios. Desde el primer descubrimiento hasta el más reciente hace unas semanas, un pequeño grupo de paleontólogos ‘invade’ cada año los alrededores de Teruel en busca de restos fósiles. SINC pasa un día con estos expertos, cuya presencia en la zona ya no sorprende a nadie.