Aunque la nieve del invierno parezca contradecirlo, en España el cambio climático puede poner en peligro las estaciones de esquí con el aumento progresivo de las temperaturas. Pero el último informe del IPCC apuntó tímidamente que el turismo contribuye a las emisiones de CO2 y debería ser una de las industrias que ayude a paliar los efectos del calentamiento global.