Un equipo de investigadores ha redescubierto una especie de ave, el carricero picudo (Acrocephalus orinus), de las que no se tenían noticias ya que tan sólo se había visto en tres ocasiones desde que fue descubierta en 1867, en el noreste de Afganistán. La historia del redescubrimiento es bastante enrevesada y se fue desplegando a lo alrgo del tiempo en diferentes lugares. Todo comenzó cuando el ornitólogo estadounidense Robert J Timmins fue a hacer un inventario de aves en la provincia de Badakshan de Afganistán y grabó el canto de un ave desconocida. La grabación llegó al ornitólogo sueco Lars Svensson, al que la descripción de la especie le hizo acordarse de un estudio que había hecho con su colega Urban Olsson. La investigación trataba sobre el carricero picudo y lanzaba la hipótesis de que el ave seguramente se había criado en el noroeste de Afganistán en los años 30. Pronto empezó a sospechar que podría tratarse de la misma especie.
Un año después, un equipo de ornitólogos afganos de la Wildlife Conservation Society consiguió viajar a la región de Badaksan a pesar de la guerra y capturó 15 ejemplares de la misteriosa especie documentada por Timmins. Los investigadores enviaron fotografías del ave a Svensson y Olsson, quienes, gracias a análisis de ADN, pudieron confirmar que, después de una búsqueda de 142 años, habían dado con la zona de cría de uno de los pájaros más desconocidos del mundo.
