Un equipo de geólogos, arqueólogos y geógrafos acaba de finalizar una campaña en el Pirineo aragonés de extracción de testigos de sedimento del fondo del lago de la Basa de la Mora (Ibón de Plan), en el marco de un proyecto de investigación que pretende reconstruir los principales cambios climáticos rápidos [ocurridos en sólo unas décadas] de los últimos 25.000 años.