La cámara del Experimento Científico de Imágenes de Alta Resolución (HiRISE) del orbitador Mars Reconnaissance de la NASA ha captado un cráter de unos 30 metros de diámetro en el centro de una formación radial de tonos claros y oscuros originada tras el impacto de un meteorito. El material salió despedido hasta 15 kilómetros de distancia.
Esta ‘cicatriz’ en la superficie marciana apareció en algún momento entre julio de 2010 y mayo de 2012, según detectó una cámara de la sonda. Después, los investigadores utilizaron HiRISE para tomar esta nueva imagen el 19 de noviembre de 2013. Cada año se originan unos 200 nuevos cráteres en el planeta rojo, pero pocos son tan atractivos como este.