El pasado 12 de enero un terremoto de 7,3º en la escala de Richter sacudía Haití. Después de este desastre natural devastador, la isla ha seguido tambaleándose con varias réplicas que la comunidad científica ya esperaba. Los gobiernos deben tomar nota de la importancia de la prevención para evitar tragedias de semejante calado. Mientras, los expertos tienen todavía mucho que aprender sobre predicción de seísmos. Investigadores estadounidenses demuestran ahora que la Falla de San Andrés en California ha estado dominada por eventos de deslizamiento menores y más frecuentes que lo que se creía hasta ahora.