En algunos tipos de cáncer, las células tumorales están rodeadas de un tejido denominado estroma, formado por células no tumorales que afectan la progresión de la enfermedad. Este efecto todavía no se conoce bastante bien, aunque es una de las líneas de investigación en cáncer más activas y que puede ofrecer en el futuro nuevas estrategias diagnósticas y terapéuticas. Ahora, un equipo de investigadores del Instituto de Investigación Biomédica de Bellvitge (IDIBELL) ha dado un paso más en la comprensión del papel del estroma en la evolución del cáncer.