Dos equipos internacionales liderados desde el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, EEUU) publican esta semana en Science sendos artículos sobre Mercurio. El primero analiza la topografía de su hemisferio norte y presenta un detallado modelo de elevación de lo que constituye una planicie volcánica, mucho menos variada que la de Marte o la Luna, por ejemplo. Los resultados apuntan a que Mercurio tuvo una intensa actividad geofísica durante la mayor parte de su historia. El segundo trabajo facilita las primeras mediciones del campo de gravedad de Mercurio que, a su vez, aporta nueva información sobre su interior, probablemente con una reserva de material de sulfuro de hierro y diferente al de otros planetas terrestres. Ambos estudios se han realizado con los datos de la sonda MESSENGER de la NASA.