Los huevos son un alimento que de un tiempo a esta parte ha ganado mala fama: el alto contenido en colesterol que tienen las yemas ha hecho que su consuma descienda en las últimas décadas. Sin embargo, investigadores de la Universidad de Alberta (Canadá) han roto una lanza a favor de estos alimentos, al descubrir que pueden ayudar a reducir la presión sanguínea. Así, las proteínas del huevo pueden tener un efecto parecido a los inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina, unos medicamentos que se prescriben para tratar la alta presión sanguínea. El estudio se publica en el Journal of Agricultural and Food Chemistry.