El incremento de la contaminación del aire podría aumentar la intensidad de los ciclones habituales en mar de Arabia, al sur de Asia, en las épocas previas al monzón. La mayoría de los ciclones que se forman en esa zona acaban desplazándose hasta tierra firme y causan enormes daños en la población. El aumento de estos fenómenos se ha dado especialmente en la última década, según publica esta semana en la revista Nature un equipo de investigadores de la Universidad de Virginia (EE UU).
Los científicos asocian este cambio con un crecimiento en las emisiones de carbono que alteran la circulación atmosférica y favorecen una mayor intensidad de los ciclones. Los autores sugieren que disminuir las emisiones podría tener un efecto casi inmediato en la tendencia de los ciclones sobre el mar de Arabia.
El único pero de este trabajo, tal y como reconocen los autores, es que sus conclusiones se basan en un número reducido de ciclones tropicales de alta intensidad que se produjeron durante el periodo de estudio. El objetivo de los expertos es analizarlos con mayor profundidad para confirmar la relación entre los aerosoles y la intensidad del ciclón.