El telescopio VISTA del Observatorio Europeo Austral (ESO), en Chile, ha capturado una nueva imagen de la Nebulosa de la Hélice en luz infrarroja. La observación revela filamentos de gas frío, invisible para imágenes tomadas en luz visible, además de revelar un rico fondo de estrellas y galaxias. Esta nebulosa, que se encuentra en la Constelación de Acuario (El Portador del Ánfora o del Agua) a unos 700 años luz de la Tierra, se formó cuando una estrella como el Sol se encontraba en los estadios finales de su vida. Incapaz de conservar sus capas exteriores, la estrella fue soltando lentamente capas de gas que fueron generando la nebulosa. La estrella caliente (el tenue punto azul que se ve en el centro de la imagen) se encuentra en la actualidad en proceso de evolución para convertirse en una enana blanca.