Desde hace tiempo, los astrónomos tratan de encontrar planetas similares a la Tierra, cuyas condiciones de temperatura y agua líquida sean suficientes como para albergar vida. La búsqueda se ha centrado en exoplanetas que orbitan alrededor de estrellas, pero ahora, gracias a un modelo informático, se ha descubierto que muchos de estos planetas no son tan habitables como parece.
Así, un planeta puede reunir condiciones muy similares a la Tierra, pero si a su alrededor tiene un planeta vecino con una órbita ‘excéntrica’, la cosa se complica. Tener, por ejemplo, como vecino a un planeta del tamaño de Júpiter, puede provocar que la órbita del planeta se vuelva elíptica, de modo que su temperatura media puede cambiar significativamente cada mil años y hacer que el planeta pase a ser inhabitable. Así, “durante determinadas época en su superficie podría existir agua líquida, pero en otras ésta se podría vaporizar”, señala Rory Barnes, de la Universidad de Washington. Sus resultados se publican en el encuentro de la Sociedad Astronómica Americana en Miami.