Los seísmos de 5,2 y 4,4 grados que azotaron ayer a la localidad murciana de Lorca sorprendieron a todos. Pero aunque las fallas en España, como la de de Alhama en Murcia, se mueven “lentamente”, era probable que se produjera porque el sureste del país es una de la zonas de mayor riesgo. La cuestión reside ahora en si el derrumbe parcial o completo de los edificios de Lorca pudo haberse evitado.