Usando simulaciones por ordenador, investigadores de la Universidad de Granada han comprobado que algunos filtros de color aumentan ligeramente los colores que se pueden discernir, pero la mejora es insignificante y el incremento no hace que las personas daltónicas perciban el mismo número de colores que las que no padecen este trastorno.
Solo en España hay casi dos millones de personas daltónicas (uno de cada 12 hombres y una de cada 200 mujeres), cuya capacidad para discriminar los colores está reducida respecto a lo que ve la mayoría de la población. Por tanto, confunden ciertos colores, lo que les lleva a enfrentarse a ciertas dificultades cotidianas en su vida diaria, además de no poder optar a determinados trabajos donde son excluidos (maquinista de tren, piloto, policía, bombero…).
Cinco investigadores de la Universidad de Granada (UGR) han modelizado computacionalmente casi 100.000 filtros de color distintos, y han estudiado cuáles de ellos incrementarían el número de colores que podrían percibir los daltónicos y cuál sería su efecto en los resultados de dos tests ampliamente utilizados para diagnosticar el daltonismo: el test de Ishihara y el test de Farnsworth-Munsell 100 Hue.
Entre los filtros modelizados, los científicos de la UGR incluyeron lentes con filtro de color que comercializan las empresas VINO y EnChroma, que han recibido gran atención mediática en los últimos años, con vídeos virales que inundan las redes sociales en la que personas daltónicas se emocionan al ponerse estas ‘gafas para daltónicos’.
Los resultados, publicados en la revista Sensors, muestran que, aunque determinados filtros incrementen el número de colores discernibles, la mejora es insignificante y el incremento no hace que los daltónicos perciban en ningún caso el mismo número de colores que los sujetos sin ese trastorno.
Simulación de cómo percibirían una misma escena distintos tipos de observadores (normal, protanómalo, protanope, deuteranómalo y deuteranope) sin el fitro (arriba) y con él (abajo). / UGR
También comprobaron que ninguno de estos filtros conseguiría hacer pasar el test de Ishihara o el test de Farnsworth-Munsell 100 Hue, siendo este último muy fiable para evaluar la visión del color en humanos.
Los datos del estudio sustentan la hipótesis de que pese al aparente éxito de las campañas comerciales de las compañías que venden este tipo de gafas, sus filtros nunca podrán permitir que las personas daltónicas perciban una escena de manera parecida a como la perciben los observadores con visión normal del color.
Este trabajo se enmarca dentro de una línea de investigación del departamento de Óptica de la UGR para analizar la eficacia de distintas ayudas que se comercializan para supuestamente “mejorar” la visión del color en personas daltónicas.
En 2018 y 2019, el mismo equipo ya demostró la ineficacia de las gafas Cx-65 de la compañía EnChroma y de las gafas 02 Amp Oxy-Iso de la empresa VINO, puesto que ninguna mejora la visión del color de personas daltónicas.
Referencia:
Miguel Ángel Martínez Domingo, Luis Gómez Robledo, Eva Valero Benito, Rafael Huertas Roa y Javier Hernández Andrés. “Spectral Filter Selection for Increasing Chromatic Diversity in CVD Subjects”. Sensors, 20 (7), 2023 (2020).