La estación ambiental MEDA del Centro de Astrobiología ha sido elegida para formar parte de la misión Mars 2020 que la NASA enviará al planeta rojo la próxima década. Sus sensores medirán la temperatura, la velocidad y dirección del viento, la presión, la humedad relativa, la radiación y las características del polvo marciano desde un rover.
Este jueves se ha hecho pública en la sede de la NASA en Washington (EE UU) la lista de instrumentos que irán a bordo de la futura misión Mars 2020 que explorará Marte a partir del 2020. Entre los instrumentos seleccionados se encuentra el Mars Environmental Dynamics Analyzer (MEDA), liderado por el Centro de Astrobiología (CAB, CSIC-INTA) y su jefe del departamento de Instrumentación, José Antonio Rodríguez Manfredi.
La estación ambiental MEDA es un conjunto de sensores que registrarán la temperatura, la velocidad y dirección del viento, la presión atmosférica, la humedad relativa y la forma y tamaño del polvo en la superficie marciana. Sus funciones serán similares a las que actualmente desempeña el instrumento REMS, también liderado por el CAB, en el rover Curiosity.
"Pero MEDA no es sólo el sucesor de REMS, es algo más, supone un salto cualitativo tremendamente importante no sólo por la ciencia que pretende llevar a cabo, sino también por el esfuerzo tecnológico que representa", destaca Rodríguez Manfredi.
El nuevo instrumento caracterizará los ciclos diurnos y estacionales de las propiedades del polvo ambiental, así como la respuesta temporal a los cambios y fenómenos meteorológicos. Además, también medirá la radiación ultravioleta, visible e infrarroja.
Aunque el CAB coordina la construcción de MEDA, en su desarrollo participan el Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial, la Universidad del País Vasco, la Universidad de Alcalá, el Instituto de Química Física Rocasolano (CSIC) en España. La industria española jugará un papel decisivo en el proyecto.
Desde EE UU intervendrán el Jet Propulsion Laboratory, el centro NASA Goddard, el John Hopkins Applied Physics Laboratory, la Universidad de Texas A&M University, la Universidad de Michigan y Ashima Research; así como la Universidad de Padua (Italia) y el Instituto Meteorológico Finés (Finlandia) en Europa.
MEDA ha competido con otras 57 propuestas de instrumentos, más del doble de las que suelen concurrir a este tipo de convocatorias. Entre las propuestas –ahora descartadas– se encontraba el Signs Of LIfe Detector (SOLID), también liderado por el CAB y el investigador Víctor Parro, y un magnetómetro coordinado por la científica Marina Díaz del departamento de Cargas Útiles e Instrumentación del INTA.
El rover Mars 2020 continuará con el objetivo de Curiosity, explorando, caracterizando y evaluando el entorno marciano como posible hábitat para la vida, aunque en este caso sí se buscarán explícitamente rastros y signos de vida marciana pasada.
También se recogerán muestras marcianas de interés para traerlas de regreso a la Tierra en proyectos posteriores, y se probarán tecnologías novedosas para ser empleadas en futuras misiones tripuladas de exploración al planeta rojo.