Técnicos de Atención Primaria han analizado la situación epidemiológica desde las consultas de los primeros médicos que se topan primero con ella, los de las consultas de cabecera. El estudio implicó a un centenar de facultativos y a otro centenar de profesionales de la enfermería y ha servido de base para elaborar la guía de atención al paciente de insuficiencia cardiaca crónica en Castilla y León.
El trabajo comenzó en primavera de 2008 y ha concluido este mes. Dirigido por el técnico de salud de Atención Primaria José Naveiro, el objetivo era "conocer las características epidemiológicas clínicas y de tratamiento de los pacientes diagnosticados de insuficiencia cardiaca en el ámbito de la Atención Primaria en el Área Sanitaria de León", indica Agustín Romero, coautor del estudio y coordinador de organización de la gerencia de Primaria del área de León.
La investigación se llama Leonic, y mostró una prevalencia del 4%, un poco inferior a la que se refleja en los dos estudios publicados y realizados en España, que oscilaba entre 5 y 6'8%. "Estas diferencias se pueden explicar, en parte por estudiar rangos de edad diferentes", explican los autores en su informe.
La prevalencia crecía con la edad, llegando al 13'7 entre las personas mayores de 80 años. Por sexos, las mujeres mostraban peores datos (4'1%) respecto a los hombres (3'7%). El medio urbano presentaba peores datos (4'3%) que el rural (3'5%). De las casi 200.00 personas asistidas en el área sanitaria de León (que comprende una gran parte de la provincia excluido El Bierzo), los expertos estimaron que entre 7.597 y 8.235 padecen insuficiencia cardiaca crónica.
Los investigadores también quisieron saber la prevalencia conocida de insuficiencia cardiaca por los médicos de Atención Primaria en el Área de Salud de León, cuantificar el consumo de recursos sanitarios y describir la calidad de vida relacionada con la salud de estas personas enfermas.
Más de 5.000 ingresos al año
Según los investigadores, en León las personas con insuficiencia cardiaca crónica generan más de 5.000 ingresos al año y casi 100.000 consultas médicas de Atención Primaria por lo que "el consumo de recur sos sanitarios es muy importante", subraya Romero, que indica que la Atención Primaria es el lugar más adecuado para el seguimiento de estos pacientes.
"El estudio demuestra que desde la Atención Primaria se puede abordar investigación en enfermedades cardíacas", apunta Agustín Romero. "Si lo comparamos con la mayoria de los estudios que son de ámbito hospitalario, esteestudio representa una población real con insuficiencia cardiaca crónica y que han sido evaluados directamente por médicos y enfermeras de Atención Primaria", prosigue.
Dos perfiles clínicos
El estudio Leonic proporciona una visión actual de cómo están siendo tratados las personas enfermas en esta área de salud. En el perfil clínico hay dos perfiles diferentes de personas enfermas. El mayoritario está constituido por personas de edad avanzada, sobre todo mujeres hipertensas con eyección del ventrículo izquierdo preservada y con patología asociada fundamentalmente a la obesidad y a cuestiones osteoarticulares.
El segundo grupo es minoritario: una persona enferma más joven de etiología isquémica en el que predominan varones, antecedentes de tabaquismo en gran proporción y con fracción de eyección del ventrículo izquierdo disminuida.
El control de peso, de la ingesta de líquidos y el manejo del diurético son muy deficientes; nuestros resultados señalan que en torno al 70% de las personas enfermas no maneja adecuadamente estos aspectos. "Es aquí dónde los profesionales de Atención Primaria debemos realizar un esfuerzo mayor, proporcionando información y consejos para que cumplan tanto con el tratamiento farmacológico como con los autocuidados que se les han prescrito", señala el informe.
Un universo local y amplio
El diseño del estudio implicó a todos las personas enfermas diagnosticadas de insuficiencia cardiaca crónica de más de 39 años que pertenecían a cualquier cupo de médicos y enfermeras del área de León. Para el análisis de los datos participaron concretamente 97 médicos y 99 enfermeros. De esta población, se eligieron a 630 personas seleccionadas aleatoriamente a partir de una población de 2.047 enfermos con insuficiencia cardiaca crónica registrados.
León tiene una población de 51.970 personas de más de 39 años, límite de edad establecido para determinar la prevalencia de este síndrome. De las personas seleccionadas, 300 procedían de zonas rurales y 330 de zonas urbanas. Finalmente se llevo a cabo un estudio con 589, 50'8% mujeres y 49'2% hombres. Un test específico mostró que "a peor calidad de vida hay más ingresos hospitalarios, más urgencias hospitalarias y urgencias de Atención Primaria", resumió Romero.
En España se han publicado algunos estudios que determinan las características epidemiológicas y clínicas de pacientes ingresados por insuficiencia cardiaca; pero es escaso el conocimiento sobre cómo se tratan los enfermos en el ámbito de la Atención Primaria que puede diferir del que llevan a cabo los servicios de Cardiología y de Medicina Interna.