El proyecto MODSIMTEX tiene un presupuesto de 4,6 millones de euros y permitirá transformar el sector textil y que las empresas con productos de alto valor añadido ahorren millones de euros al año.
El Instituto de Investigación Textil y Cooperación Industrial (INTEXTER) de la UPC lidera el proyecto de investigación europeo MODSIMTEX (Modelización y Simulación Textil), que generará una nueva tecnología capaz de hacer ahorrar toneladas de materia prima, tiempo y energía a los fabricantes de la industria textil. En este proyecto, un consorcio de doce empresas y laboratorios de investigación punteros en toda Europa diseñarán un sistema inteligente capaz de reducir, en tres cuartas partes, el tiempo y la materia prima necesarios para la puesta a punto de la maquinaria de las cadenas de producción de productos de alto valor añadido. El nuevo sistema estará terminado en poco más de tres años.
Para los industriales textiles que trabajan los llamados tecnotextiles u otros productos con alto valor añadido, una de las operaciones más costosas, y que incide directamente en el precio final del producto, es la puesta a punto de las máquinas que forman parte de la cadena de producción.
Este tipo de empresa que fabrica productos de altísima calidad, con controles muy exigentes, cambia muy a menudo, diariamente, el tipo de producto que fabrica (algunas empresas llegan a fabricar más de mil productos diferentes cada año).
Por ello, los técnicos tienen que adaptar nuevos parámetros al nuevo producto y tienen que calibrar y reconfigurar continuamente la maquinaria con operaciones de prueba-error, lo cual comporta la inversión de un buen número de horas, de energía y de materia prima en este proceso, inversión que repercute, finalmente, en el precio que paga el cliente. Y, en definitiva, este hecho resta competitividad.
MODSIMTEX generará una nueva tecnología capaz de reducir, en un 75%, el tiempo y la materia prima y permitirá ahorrar hasta un 7% en la energía que hay que invertir en la puesta a punto de las maquinarias cuando se cambia de producto. Esta tecnología, que se basa en un sofisticado y complejo software ligado a sistemas de inteligencia artificial, se podrá integrar directamente en la cadena productiva de cualquier empresa textil.
El proyecto MODSIMTEX tiene un presupuesto total de 4,6 millones de euros, de los cuales la Unión Europea aporta 3,3 y el INTEXTER de la UPC gestionará directamente 1,7 millones. El resto lo aportan los otros once socios europeos. El proyecto tiene una duración de tres años y medio y ha sido aprobado recientemente por la Unión Europea dentro del séptimo Programa Marco de I+D.
Un ejemplo de aplicación
Uno de los productos tecnotextiles de alto valor añadido es el llamado paper bed coating, un recubrimiento textil fabricado con tejido no tejido que hay que integrar en los grandes carretes de las rotativas y que funciona a modo de lecho a fin de que los diarios, las revistas o cualquier publicación impresa salga con condiciones idóneas de calidad.
El paper bed coating debe tener unas características muy afinadas, porque se cambia muy a menudo, según el tipo de papel con el que trabaje la rotativa. Cada vez que se cambia el tipo de papel hay que cambiar el paper bed coating. Las máquinas que fabrican este recubrimiento especial son enormes, pesan muchas toneladas y deben reconfigurarse cada vez que se cambia el tipo de recubrimiento que hay que fabricar. Las pruebas para la reconfiguración de la maquinaria comportan tirar toneladas y toneladas de tejido, invertir energía no productiva y perder horas de trabajo igualmente improductivas.
Solo para medios:
Si eres periodista y quieres el contacto con los investigadores, regístrate en SINC como periodista.
Un equipo internacional de científicos, liderados desde el Instituto de Nanociencia y Materiales de Aragón, ha creado el primer imán duro de espesor atómico. El avance tiene aplicaciones potenciales en dispositivos tecnológicos que requieren un campo magnético definido, como las memorias RAM de los ordenadores.
En la interfaz entre dos capas rotadas de titanato de bario, con solo unos pocos átomos de espesor, aparecen propiedades que podrían revolucionar la ciencia de los materiales ferroeléctricos y ser útiles en la electrónica e informática del futuro. Los detalles los publican en Nature investigadores de la Universidad Complutense de Madrid.
