La recientemente descubierta masa de los neutrinos tiene un valor tan pequeño, comparado con otras partículas elementales, que su explicación es un problema abierto en Física de Partículas de Altas Energías. En un reciente artículo de un grupo investigador del Instituto de Física Teórica, IFT-UAM/CSIC, se propone una explicación basada en la existencia de efectos de instantón en Teoría de Cuerdas.
Los neutrinos son una de las partículas elementales más enigmáticas de la Naturaleza. A diferencia de otras partículas elementales, como los electrones o los quarks (constituyentes de protones y neutrones), los neutrinos no tienen carga eléctrica, y hasta hace pocos años se dudaba de que siquiera tuvieran una de las características más propias de las partículas: la masa.
Los neutrinos son muy abundantes en el Universo, ya que se producen profusamente (además de en reactores nucleares y en rayos cósmicos en la atmósfera terrestre) en las reacciones nucleares de fusión en las estrellas, como el Sol. A pesar del intenso flujo de neutrinos que nos atraviesa, la interacción de los neutrinos con la materia es extremadamente débil y los hace prácticamente indetectables. Su estudio experimental requiere la construcción de enormes detectores subterráneos de miles de toneladas de material, cantidad necesaria para detectar una mínima fracción del flujo de neutrinos. Los datos experimentales en las últimas décadas (confirmados en 1998 por el detector super-Kamiokande en Japón) han mostrado que los neutrinos tienen una masa no nula, si bien ridículamente pequeña: aproximadamente 10^8 (100 millones de) veces menor que la del electrón!!
¿Por qué la masa de los neutrinos es tan pequeña comparada con la de otras partículas elementales? En 1977 el físico suizo Peter Minkowski avanzó una posible respuesta. Propuso la existencia de un nuevo tipo de neutrinos llamados dextrógiros (right-handed), con una masa M elevadisíma, del orden de 10^14 (100 billones de) veces la del protón. En su modelo, la masa de los neutrinos observados experimentalmente, estaría dada por la fórmula mneutr=m²/M (donde m sería la masa característica del resto de las partículas elementales). Este valor concuerda bien con el orden de magnitud de las masas de neutrinos observada experimentalmente. El modelo es conocido como el mecanismo del “balancín” (seesaw en inglés), porque la elevada masa del neutrino dextrógiro “empuja” a valores muy pequeños el valor de la masa del neutrino observado experimentalmente.
Esta propuesta es la explicación más aceptada, pero no parece despejar todas las incógnitas: ¿Qué son estos neutrinos dextrógiros? ¿Cuál es el origen de su enorme masa M? Desde el punto de vista teórico, la existencia de neutrinos adicionales dextrógiros es natural. Muchas de las teorías que intentan unificar las interacciones fundamentales de la Naturaleza en una sola teoría unificada (como en las llamadas Teorías de Gran Unificación, o en las Teorías de Cuerdas) admiten o predicen la existencia de estos neutrinos dextrógiros. Sin embargo, estas teorías no parecían proporcionar una explicación natural de la magnitud de su masa M.
Una posible explicación surge de resultados recientes sobre la dinámica de instantones en las Teorías de Cuerdas, según las investigaciones de Luis E. Ibáñez y Ángel M. Uranga, miembros del Instituto de Física Teórica (IFT), instituto mixto de la Universidad Autónoma de Madrid y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (y simultáneamente propuesto por un grupo de investigadores de la Universidad de Pensilvania y del Instituto Max Planck, Munich). Los resultados del grupo del IFT han sido publicados en el artículo “Neutrino Majorana masses from String Theory Instanton Effects”, publicado en la revista Journal of High Energy Physics, JHEP 0703:052,2007.
La Teoría de Cuerdas es el marco teórico más sólido que contempla la unificación de las cuatro interacciones fundamentales de la Naturaleza (el electromagnetismo, las interacciones nucleares fuerte y débil, y la gravedad), de forma consistente con las leyes generales de la Mecánica Cuántica. En esta teoría los componentes fundamentales de la materia no son partículas puntuales, sino 'cuerdas', distribuciones de energía en forma de filamento. Los diferentes modos de vibración de las cuerdas corresponderían a las partículas elementales y a las partículas mediadoras de las cuatro interacciones fundamentales. El tamaño característico de estas cuerdas es extremadamente pequeño, del orden de 10^18 (un millón de billones de veces) menor que el radio de un protón. El reino natural de la teoría está a una escala de energía (y por tanto de masa) denominada Ms, del orden de 10^21 (1000 millones de trillones) veces mayor que la masa del electrón. Esta escala es enorme, e inaccesible experimentalmente, pero podría tener consecuencias observables, y en particular estar relacionada con la enorme masa de los neutrinos dextrógiros. Para ellos es necesario encontrar un mecanismo que explique su relación: A pesar de su enormidad, la escala M es todavía un millón de veces menor que la escala de la cuerda Ms.
El mecanismo propuesto por los investigadores del IFT se basa en generar la masa de los neutrinos dextrógiros mediante un efecto de instantón en Teoría de Cuerdas. En la Teoría de Cuerdas, como en toda teoría consistente con la Mecánica Cuántica, el espacio vacío dista mucho de estar realmente vacío. En particular, existen efectos denominados “instantones” en los que del vacío surge un condensado de energía cuántica que desaparece casi instantáneamente (de ahí el nombre). Estos instantones se denominan efectos “virtuales”, si bien son muy reales y llevan a efectos físicos observables, cuya magnitud está suprimida por la pequeña probabilidad P de la aparición de un instantón.
Los investigadores del IFT proponen que en determinados modelos de cuerdas existen instantones con la propiedad de que sólo los neutrinos dextrógiros son sensibles a ellos. Los neutrinos dextrógiros son por tanto las únicas partículas que, al propagarse, "tropiezan" con las fluctuaciones instantónicas del vacío. El efecto neto de estos tropiezos es producir una resistencia al avance de los neutrinos dextrógiros, una inercia, es decir una masa. El valor de esta masa es la masa Ms multiplicada por la probabilidad P del proceso instantónico. Este último factor sería precisamente el requerido para que la masa de los neutrinos dextrógiros tenga un valor suprimido respecto de la escala Ms, y se encuentre en el rango requerido para el mecanismo seesaw descrito anterioremente.
La realización de este mecanismo en la Naturaleza proporcionaría una fascinante conexión entre la diminuta masa de los neutrinos y las fantásticamente gigantescas escalas de masas en las que se produce la unificación de todas las partículas e interacciones.